La cotización del oro ha mantenido una tendencia positiva en los últimos días, ganando con ello, confianza entre los inversores. ¿Vale la pena redoblar las apuestas en el metal precioso?
Luego de haber presentado su peor desempeño en los últimos cinco años, el precio del oro ha llamado la atención en la plaza financiera al acumular un alza de 5% durante los últimos treinta días.
De acuerdo con cifras de Market Watch, los futuros del metal precioso han avanzado alrededor de 50 dólares en las últimas dos semanas, en vista de que los inversores han caído en cuenta de que la tan esperada suba de las tasas de interés de referencia de la Fed no se realizará próximamente.
Inclusive, el rally del commodity despertó el interés especulativo de los traders, una vez superada la valoración de 1.140 dólares hace unos días, lo que sugiere el desarrollo de una tendencia con potencial a corto plazo.
Los factores de impulso
La postergación del incremento en las tasas de interés ha sido un factor determinante para el ascenso del oro en días recientes, así como la incertidumbre que gira en torno al comportamiento del mercado accionario y el comienzo de la temporada de balances para las empresas.
Como refugio tradicional para los inversores, el metal también se ha beneficiado del debilitamiento que está experimentando el dólar estadounidense, según los especialistas de Market Watch.
Frente a la pérdida de credibilidad de la Fed, al no poner en marcha las políticas anunciadas insistentemente durante todo 2015, el oro ha ganado adeptos.
Sumado a ello, el alza general registrada en el segmento de materias primas se hizo sentir sobre ls activos vinculados a este actor. Durante el último mes, el petróleo ha repuntado cerca de 6%, mientras que la plata, el aluminio y el platino también están viviendo un buen momento.
El pronóstico
En la plaza, los analistas sugieren que los elementos que están dando lugar al rally del oro, son precisamente el motivo por el que esta tendencia no se mantendrá a futuro. Esto, debido a que se trata de variables que no son inherentes a los fundamentos de inversión del metal en sí.
En esa línea, tal como se establece en un reporte de CNBC, los inversores están acudiendo a las posiciones en oro como protección ante las decisiones de la Fed y una vez se ejecuten las medidas anunciadas durante 2015, el commodity perderá fuerza.
Esto se debe a que las bajas tasas de interés le restan atractivo a las alternativas de inversión de renta fija, lo que provoca que los ahorristas acudan a refugios como el oro. Una vez que los rendimientos de los títulos de deuda aumenten, los activos del metal serán abandonados en cierta medida.
Ante las circunstancias, algunos expertos sugieren que la bonanza del metal puede servir para vender los instrumentos relacionados con éste, a buen precio.
Las proyecciones sugieren que el fondo SPDR Gold Trust ETF (GLD), se mantendrá cotizando en torno a los 113 dólares en el corto plazo, lo que según los estrategas será su precio de resistencia.
Las inversiones en torno al oro deben considerarse apuestas a largo plazo, que permiten mantener su cartera a salvo de eventualidades en el mercado, por lo que independientemente de los acontecimientos que tengan lugar hoy, siempre es una idea acertada conservar una porción del patrimonio en instrumentos vinculados al metal.
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