Alberto Redondo
Corresponsal de IG en Madrid, España.
El Presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, mantuvo ayer un encuentro en Roma con su homólogo italiano, el Primer Ministro Enrico Letta.
Inicialmente, el objetivo de la cumbre hispano-italiana era hablar sobre cómo adoptar una estrategia común en las negociaciones de cara a la unión bancaria europea y alcanzar la resolución del conflicto por las obras de ampliación del Canal de Panamá donde dos empresas, una española y otra italiana, se encuentran negociando con el Gobierno de Panamá una solución al problema.
Sin embargo, la crisis en los mercados financieros desatada la semana pasada por la brusca devaluación del peso argentino protagonizó el encuentro entre los dos jefes de gobierno europeos.
Rajoy mostró su confianza en que la situación en Argentina “se estabilice cuanto antes”. Rajoy calificó a la Argentina como un país amigo en el que las principales empresas españolas -BBVA, Santander y Telefónica- tienen grandes intereses comerciales.
Dentro de las grandes empresas europeas que componen el índice Eurostoxx, fueron las empresas españolas las que protagonizaron mayores caídas la semana pasada debido a su mayor exposición al mercado argentino.
Esto se produjo ante el temor de que, como advirtió Moody”s ayer, el peso argentino se devalúe hasta un 50 por ciento este año, afectando profundamente a las unidades de negocio de estas empresas en Argentina.
Al mismo tiempo, Standar´s and Poors alertó que por la depreciación del peso, las deudas en dólares de las empresas van a tener una importancia mayor en sus presupuestos. El organismo además aclaró: . “La calificación de la Argentina ya es lo suficientemente baja [CCC+, con perspectiva negativa] para incorporar procesos como el actual”
