La semana pasada se conoció el índice de precios al consumidor (IPC) del mes de enero, a través del cual se mide la tasa de inflación. Todos los meses se publica el dato del IPC, pero esta vez fue noticia ya que, debido a algunas manipulaciones a las que fue sometido, dio un número inferior al esperado. Según el Indec, la inflación de enero fue de 1,1%, mientras que se pronosticaba un número cercano a 2%.
Esta diferencia se explica, básicamente, por dos rubros de dicho índice: salud y turismo. Con respecto a salud, se generó una controversia sobre como computar los recientes aumentos en la medicina prepaga, y el gobierno se inclinó por la que implica un aumento menor, aunque hay fuertes razones teóricas para tomar la otra opción. En el caso del turismo, se habrían tomado las listas de valores de los acuerdos de precios de la Secretaría de Turismo en vez de los relevamientos de precios del Indec, lo que hizo que no se registraran aumentos de precios en este rubro con respecto a enero del año pasado, lo cual dista bastante de la realidad.
Lo que mide el IPC es la variación en el valor de una canasta de bienes, que se define luego de encuestas y trata de ser representativa del consumo promedio de una familia. Por supuesto que los consumos de las familias van variando, pero por una cuestión de costos operativos se usa una misma canasta, que se renueva cada aproximadamente 10 años. Además, hay tantas canastas posibles como familias, pero la elegida trata de captar al consumidor promedio. Estas no son particularidades de las estadísticas locales, sino que la metodología usada aquí es igual a la de los países desarrollados.
Como el CER se calcula en base al IPC, los bonos indexados por este coeficiente sufrieron bajas importantes a raíz de lo comentado. Aún así, podemos destacar como hecho positivo la reacción del público, la prensa y la oposición, que creemos que servirá para que no sea posible otra manipulación de este tipo, ya que acarrearía costos políticos importantes.
Por ello creemos que los activos con CER tienen posibilidades de recuperar sus cotizaciones, y aunque existen estos problemas, tienen un ajuste interesante que no tienen otros activos.
